Trabajar desde la casa tiene algunos beneficios tanto para las empresas que ahorran dinero como para las personas que ahorran tiempo y dinero en transportarse.
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Pero la realidad marca que si no se tienen en cuenta algunos aspectos, esta experiencia puede ser un fracaso ya que es muy fácil distraerse en la casa, con llamadas, el timbre, la televisión, los hijos, etc. Únicamente las personas muy disciplinadas logran aislarse de todo y ser eficientes.
El escritor Grant Cardone, autor de “Si no eres el primero, eres el último”, advierte que la disciplina al trabajar desde la casa es fundamental y aquellos que no son estrictos, no son productivos y expresó que “mucha gente falla por esto.”
Si quieres trabajar desde tu casa o ya lo haces, pero notas que tu productividad no es buena, toma en cuenta los siguientes consejos:
1 - Ten un espacio apartado para tu oficina
El hecho de que no tengas que ir a una oficina y sentarte junto a otros compañeros no significa que tus días sean en pijamas dentro de tu cama o en una mesa con tu laptop frente al televisor.
Lo recomendable es tener tu propio espacio de trabajo en tu casa. Además marcarte una rutina, levantarte, vestirte e “ir a trabajar” a ese lugar que acondicionaste para hacerlo. Evita que sea dentro de tu dormitorio y procura que sea lejos de un televisor.
2 - Establece límites
Ese espacio que has designado para trabajar deberá estar restringido a tu trabajo. Evita que tus hijos, mascotas o amigos ingresen allí. No debes mezclar aspectos de la vida personal con lo laboral.
3 – Fija un horario de trabajo
Tener asignadas las horas que trabajarás ayudará a que tu productividad no se vea afectada por hacerlo desde casa. Lo mismo sucede con la vestimenta, al levantarte vístete como si fueras a salir a una oficina.
Joel Garfinkle, autor de "Getting Ahead: Three Steps to Take Your Career to the Next Level", explica que las personas además de tener un horario fijo para trabajar desde casa deben asegurarse que su familia respete esas reglas.
4 – Cambia tu mentalidad
Pensar que al trabajar desde casa podrás ser más flexible y evitar largas jornadas es un error y afectará tu productividad. No ir a una oficina no puede ser una excusa para no hacer nada o trabajar menos horas.
5 – Debes tener autocrítica
Debes tener autocrítica para detectar si tu productividad ha descendido desde que trabajas en tu casa. Si este es el caso debes tomar medidas y volver a trabajar a una oficina, alquilar un local o cambiar tu actitud.
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