La Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) presentó el Informe de Seguimiento de la Educación Para Todos, donde expone qué sucedió en cada país y a nivel global con los 6 objetivos fijados en Dakar en el 2000.
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El Informe de Unesco evalúa si se logró cumplir con los objetivos plasmados y cómo fue el papel de las partes implicadas, determinando los aspectos que deberán configurar la agenda mundial después de 2015. A continuación se exponen algunas de las conclusiones del Informe de Unesco que analiza qué pasó con los 6 objetivos de la EPT.
Objetivo 1. Atención y educación de la primera infancia
Este objetivo pretendía extender y mejorar la protección y educación en la primera infancia, atendiendo más que nada las necesidades de los niños más vulnerables y desfavorecidos. Para esto, se tomaron en cuenta los indicadores de supervivencia, salud, nutrición y acceso a las posibilidades de aprendizaje.
El informe relata cómo a pesar de reducir a la mitad la tasa de mortalidad infantil, en 2013 fallecieron 6.3 millones de niños menores de 5 años por causas que se podrían haber prevenido. En cuanto a la nutrición infantil, a pesar de las mejoras conseguidas, se constata que 1 de cada 4 niños alrededor del mundo tiene una estatura menor a la normal para su edad a causa de la deficiencia crónica de su alimentación esencial.
Por otro lado, la matriculación de niños en edad escolar presentó un aumento de casi dos tercios desde 1999, llegando a unos 184 millones de niños en 2012. América Latina tuvo una mejora constante de escolarización de los niños debido a que para 2012, 40 países habían fijado la obligatoriedad de la enseñanza preescolar.
Sin embargo, el Informe asegura que la atención de los niños pequeños sigue siendo un gran problema y para atacarlo se debe insistir en los conocimientos, competencias y condiciones de aprendizaje; además de considerar la remuneración de los maestros de enseñanza preescolar.
Objetivo 2. Enseñanza primaria universal
El objetivo apuntaba a alcanzar la enseñanza primaria gratuita, obligatoria y de calidad para todos los niños, poniendo el énfasis en aquellos que se encuentran inmersos en zonas más vulnerables.
En cuanto a esto se logró aumentar las tasas de escolarización en la enseñanza primaria, ya que creció en 17 países un 20% desde 1999 a 2012; pero sin embargo para esa fecha había alrededor de 58 millones de niños sin escolarizar, y esta cifra está estancada y no logra reducirse desde 2007.
Otras de las problemáticas en las que se avanzó algo pero no tanto como para solucionarlas fue la deserción escolar y las diferencias en el acceso a la educación, por lo que aún hay millones de niños que no logran acceder a la enseñanza por causas que tienen que ver con la pobreza, el género, la ubicación geográfica o las pertenencias étnicas, entre otras.
Objetivo 3. Competencias de jóvenes y adultos
La meta era lograr un acceso equitativo de jóvenes y adultos a la educación, garantizando un programa de aprendizaje que además de la educación formal en las escuelas brindara experiencias extraescolares, como por ejemplo la formación en el trabajo.
Este punto tampoco logró una completa solución, y la disparidad en aspectos como la transición de la educación primaria a la secundaria sigue existiendo. Por ejemplo, en Filipinas menos del 70% de egresados del primer ciclo de educación que provienen de familias más pobres logran continuar con la secundaria, mientras que entre los que pertenecen a familias más ricas lo logran en un 94%.
Objetivo 4. Alfabetización de los adultos
El objetivo era aumentar en un 50% la cantidad de adultos alfabetizados y lograr un acceso equitativo a la educación básica y permanente de los adultos.
Sin embargo, en los últimos 5 años logró reducirse el analfabetismo nada más que en un 4%, cifra que quedó muy lejos del objetivo de Dakar de reducirlo a la mitad. Hoy en día siguen habiendo unos 781 millones de analfabetos en todo el mundo.
En cuanto a la igualdad de hombres y mujeres alfabetizados se lograron ciertos avances, ya que para el año 2000 se había mejorado la paridad en todos los países donde había menos de 90 mujeres alfabetizadas por cada 100 hombres; pero a pesar de los logros, el Informe de Unesco determina que estos son insuficientes.
Objetivo 5. Igualdad de Género
El plan era eliminar las diferencias de género en la enseñanza primaria y secundaria, asegurando la igualdad de ingreso a la escuela entre los distintos sexos.
Entre el 1999 y el 2012, se logró reducir de 33 a 16 los países que tenían menos de 90 niñas asistiendo a la escuela por cada 100 varones. Esto resultó un avance en cuanto a la disparidad de género en la educación primaria.
Los datos analizados dejaron de manifiesto que entre los niños que no están inscriptos en la escuela, las niñas son las que tienen más posibilidades de no asistir nunca, pero una vez que ingresan son las que logran llegar a grados más altos de enseñanza; mientras que una vez que los varones asisten a la escuela son quienes más probabilidades de deserción tienen.
Para lograr una igualdad de género en la enseñanza, el Informe asegura que se debe atender a la contratación de más docentes mujeres en todos los niveles, además de capacitar a los profesores y lograr una reforma de libros de texto y planes de estudio que apunten a este fin.
Objetivo 6. Calidad de la Educación
La aspiración era mejorar los aspectos cualitativos de la educación logrando llegar a los parámetros más altos en lectura, escritura, aritmética y competencias prácticas.
Un 83% de los países pudo reducir el número de alumnos por docentes en las aulas; pero a pesar de la contratación de más profesores, aproximadamente un 75% de éstos no recibieron una capacitación que ajustara a las normas nacionales de satisfacción. Por esta razón se deben realizar inversiones en la formación de docentes así como también en la elaboración de programas de estudio y uso de nuevas tecnologías que contribuyan a una educación de calidad.
Para lograr éste fin, una de las medidas a las que se acoplaron varios países fue la implementación de las evaluaciones de aprendizaje, que pasaron de realizarse en 12 países en 1990 a 101 en 2013.
El Informe de Seguimiento presentado por la Unesco que resume los logros obtenidos de los 6 objetivos de Dakar, deja de manifiesto que a pesar de haberse logrado algunos progresos, no se pudo cumplir de manera óptima con los compromisos asumidos para la Educación Para Todos.
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