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Es común que los estudiantes universitarios tengan dificultades para concentrarse. Es que, hoy en día vivimos en un mundo lleno de estímulos, que constantemente nos invitan a vivir en una vorágine y cambiar todo el tiempo. Por eso puede resultar una difícil batalla intentar leer más de diez hojas seguidas.
Aunque no lo creas existen algunos culpables de tu falta de concentración que hoy vamos a poner en evidencia para que la próxima vez que te toque una larga jornada de estudio no te encuentres desprevenido. ¡Anímate a hacerle frente a esas distracciones que perjudican tus calificaciones!
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No todo lo que estudiamos nos entusiasma en la misma medida, hay cosas que nos resultan más interesantes que otras. Por esto mismo es que debemos batallar constantemente con el aburrimiento. Te aconsejamos que hagas un pacto contigo mismo para establecer pequeñas metas y premios que conseguirás en caso de que las alcances. Verás que la tarea te resulta mucho más fácil.
Cuando tienes la cabeza en millones de cosas al mismo tiempo es inevitable sentirse estresado o abrumado por la situación. Utiliza técnicas de estudio que te ayuden a reducir el estrés previo a sentarse a leer y durante estás concentrado. Así evitarás que tu mente se disperse con problemas que nada tienen que ver con la vida universitaria.
Es imposible mantenerse por fuera de las redes sociales. Para los jóvenes todas las noticias del país y del mundo pasan por ahí. En las redes te encuentras con amigos, organizas fiestas e incluso intercambias información pero debes saber que es un gran factor de distracción. Mientras estés estudiando evita iniciar sesión.
Al igual que las redes sociales el teléfono celular ha generado en los jóvenes una dependencia impensada. Buena parte de sus vidas se vive a través de él. Pero, a la hora de estudiar se convierte en uno de los principales enemigos. Como consejo te recomendamos dejarlo en otra habitación y en silencio, lejos de donde te encuentras concentrado. Es una buena técnica para evitar revisarlo continuamente.
Todos los jóvenes necesitan dormir al menos ocho horas por día para estar lo suficientemente descansados. Esta es la única alternativa que ayudará a palear largas jornadas de estudio. Ni el café ni los energizantes te otorgan la calma, la concentración o la energía que viene aparejada con un buen descanso.
